México- La cantante y actriz Maribel Guardia rompió el silencio tras el fallecimiento de su joven hijo, el pasado 9 de abril, Julián Figueroa, “Dios me bendijo con un hijo, Dios me lo quitó. Que vuele alto, algún día nos volveremos a encontrar. Yo espero que ahora esté con su papá”.
Afuera de su casa, en la Ciudad de México, visiblemente triste, llorando, vestida de negó y con gorra, agregó que, “he recibido tantas flores, ayer no quería ni ver flores, me decían ‘flores’ no quiero ni ver flores, no quiero nada, no aterrizaba ayer todavía, lo agradezco y le pido a todos los que me están viendo que recen mucho por mi hijo, que recen mucho por nosotros, para que podamos tener valor. Le pido a Dios, todos los que me están viendo que sus hijos los vean crecer, los vean casarse, los vean tener nietos, los vean triunfar y que sus hijos los entierren a ustedes, porque no hay dolor más grande que enterrar a un hijo y pasar este dolor tan grande, no se lo deseo a nadie”.
Maribel Guardia estuvo acompañada de su nuera, Imelda Tuñon, “gracias a Dios me dejó a esta niña tan linda, mi nuera, que la adoro y a un bebé precioso que tenemos que sacar adelante. va a ser nuestra labor educarlo y darle alas para volar, él era un gran papá, le dedicaba mucho tiempo a su hijo y, ayer Ime, le dijo que su papá había muerto que era un ángel, pero todavía no lo entiende, obviamente”.
También explicó sobre el sepelio privado de su hijo Julián, “no quise hacer nada en una funeraria, porque Julián murió en la casa, y cuando murió su papá sufrió muchísimo con que lo anduvieran de arriba para abajo”.
Y, “no quiero deshacerme de sus cenizas. El amor que siento por mi hijo va a durar hasta el día que me muera”.
“Necesitábamos vivir este dolor en familia con gente que realmente conoció y amó a Julián. Vivir este duelo que yo sé que apenas está empezando, nos falta mucho camino por recorrer (…) Era mi amor, mi niño de mis ojos y ha sido muy duro perderlo. Tenía tanto por recorrer, estaba empezando su carrera”.
Fotografía: tomada de video.