Tokio, Japón- A quince días de que inicien los Juegos Olímpicos, el primer ministro japonés, Yoshihide Suga, anunció este jueves el cuarto estado de emergencia para Tokio, por un aumento de casos de coronavirus que atribuyó a la variante Delta, confirmando que no se permitirá público en las sedes olímpicas en la capital.
Las restricciones comenzarán el lunes 12 de julio y se extenderán hasta el 22 de agosto, e aconseja a la población trabajar desde casa y que los bares y restaurantes prohíban la venta de alcohol.
En Japón, la vacunación avanza lentamente y solo un 15% de la población ha recibido algún biológico contra la COVID-19.
El ministro japonés encargado de la gestión de la pandemia, Yasutoshi Nishimura, declaró, “con el aumento del movimiento de personas, la variante Delta, más infecciosa, representa ahora alrededor del 30 % de los casos. Se espera que esta cifra siga aumentando”.
Los Juegos de Tokio fueron aplazados el año pasado a causa de la pandemia y esperan recibir a cerca de 11.000 deportistas de 200 países.
En un comunicado conjunto sobre el tema de los espectadores presenciales, hoy, tras la decisión tomada por el Gobierno de Japón (GoJ) de anunciar el estado de emergencia en Tokio, se han reunido las cinco partes: el Comité Olímpico Internacional (COI), el Comité Paralímpico Internacional (IPC), el Comité Organizador de Tokio 2020, el Gobierno Metropolitano de Tokio (TMG) y el GoJ.
Durante esta reunión, el COI y el IPC han sido informados por las partes japonesas sobre el impacto de este anuncio en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio 2020 y éstos han apoyado las políticas que han presentado las partes japonesas.
Agregando que, “El COI y el IPC, respetando esta decisión, la han apoyado en aras de unos Juegos seguros para todo el mundo. Al mismo tiempo, las cinco partes lamentan profundamente, por los atletas y los espectadores, que esta medida haya tenido que implementarse”.
Las decisiones principales son las siguientes:
- El GoJ ha decidido hoy anunciar el estado de emergencia en Tokio. El estado de emergencia en Tokio se ha implementado como medida para suprimir el flujo de personas y, de este modo, prevenir la propagación de la infección ahora, ya que el número de casos confirmados de COVID-19 sigue siendo alto y el número de personas infectadas por las variantes del COVID-19 en Tokio está aumentando.
- La conclusión de la reunión de las cinco partes que tuvo lugar el 21 de junio de 2021 fue: “en el caso de estado de emergencia o cualquier otra medida prioritaria para prevenir la infección que puedan ser implementadas en cualquier momento después del 12 de julio de 2021, las restricciones en el número de espectadores en los Juegos -incluyendo las competiciones sin espectadores- se basarán en el contenido del estado de emergencia o cualquier otra medida relevante impuesta en ese momento”. En respuesta al estado de emergencia, las tres partes japonesas han tomado también medidas más estrictas de cara a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. No se permitirán espectadores en ninguna sede en Tokio durante los Juegos Olímpicos. Bajo esta política, en las áreas donde las medidas del estado de emergencia no están implementadas, las autoridades locales se reunirán y decidirán medidas específicas siempre consultando con los gobernadores locales y basadas en la situación de cada área.
- En el caso de un cambio significativo en el estado de la infección, se convocará inmediatamente una reunión entre las cinco partes para revisar la capacidad en cuanto a espectadores.
- En la misma reunión del 21 de junio, también se fijó: “Las políticas equivalentes que se llevarán a cabo para los Juegos Paralímpicos se decidirán para el 16 de julio de 2021, una semana antes del comienzo de los Juegos Olímpicos”. Sin embargo, ahora se hace necesario tomar una decisión basada en la situación de la infección que prevalece en el tiempo. Por esta razón, la decisión sobre admitir espectadores a los eventos de los Juegos Paralímpicos ahora se tomará cuando finalicen los Juegos Olímpicos.