Gaceta UNAM

México- La Batalla de Puebla tuvo lugar del cinco de mayo de 1862. El ejército mexicano se enfrentó a los franceses, mucho mayores en número y en poderío de armas. El General Ignacio Zaragoza estuvo al frente de los mexicanos, que ganaron la batalla contra todo pronóstico.

Zaragoza murió solo cuatro meses después de esa gran victoria el 8 de septiembre de 1862 víctima de tifus murino, una enfermedad transmitida por las pulgas de las ratas.

El cinco de mayo de 1867, cinco años después de la Batalla de Puebla, un grupo de mexicanos celebró esa victoria en Texas, que fue el lugar donde nació Zaragoza en 1829, 16 años antes que Texas fuera anexado como parte de Estados Unidos. A partir de entonces, la celebración popular se volvió un símbolo para los mexicanos que vivían opresión de parte de invasores o gobiernos extranjeros, y ganó arraigo entre quienes vivían en los estados que pertenecieron a México.

Otros latinos comenzaron a celebrar el cinco de mayo y se volvió muy popular. En 1930, el consulado mexicano en Los Ángeles realizó una celebración de esta fecha, lo cual le dio carácter oficial, lo cual unió a los mexicanos que ya vivían allí y a los nuevos migrantes que iban llegando a Estados Unidos.

Desde entonces, el cinco de mayo se ha vuelto una fiesta cultural que celebra tanto a mexicanos como a latinos en Estados Unidos, lo que ha hecho que sea una fecha incluso más importante que el Día de la Independencia.

Zaragoza, el chinaco fronterizo

Ignacio Zaragoza era chaparrito y usaba lentes, pero era un líder natural y fue bautizado como el chinaco fronterizo. En ese entonces, el término era aplicado a los rebeldes oprimidos que luchaban contra el poder, la iglesia y “los catrines”. Eran considerados valientes y fue el nombre que se les dio a los soldados que lucharon ante la invasión francesa.

El movimiento chicano en Estados Unidos adoptó el cinco de mayo como uno de sus símbolos contra la opresión, y se volvió una bandera de lucha para mexicanos, latinos y migrantes que padecían por el simple hecho de ser minorías.

Fuente: México a través del tiempo, Editorial Cumbre S.A.
Fronteras Fragmentadas, Centro de Investigaciones y Desarrollo del Estado de Michoacán, 2009

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