Chihuahua, Chih,- En plena crisis por el COVID19, con el estado ubicado como el primero en regresar a Semáforo Rojo (alto riesgo) tras la ola de contagios que en una semana acumularon en la anterior semana 2,626 nuevos contagios y 144 personas fallecidas, el gobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado, vistió de gala el palacio de gobierno para encabezar un acto partidista con título rimbombante, “Cierre de filas por Chihuahua: Pronunciamiento en Defensa de la Dignidad y la Soberanía del Pueblo de Chihuahua y de sus Instituciones”, consistente en culpar al gobierno federal de todos los males que aquejan al Chihuahua, exigiendo la solución al conflicto del agua, la reincorporación a la coordinación en materia de seguridad y más presupuesto, así como la reinstalación de fideicomisos.
Acompañaron al gobernador figuras como, el rector de la UACH, Luis Alberto Fierro Ramírez; el alcalde de Jiménez, Marcos Chávez Torres; el alcalde de Camargo, Arturo Zubia Fernández; el alcalde de Parral, Jorge Alfredo Lozoya Santillán; los Agricultores Unidos de la Rivera de Conchos, Jorge Aldana Aguilar; por la Fechac, Hugo Loya Pliego; el Pbro. Javier Ávila; por el sector empresarial, José Luis Barraza González; por el Movimiento Estatal de Mujeres, Graciela Ramos; del Instituto Tecnológico de Cuauhtémoc, Leticia Corral Bustamante; la alcaldesa de Valle de Zaragoza, Yolanda Venzor Meléndez, el alcalde de Gran Morelos, Gilberto Gutiérrez Montes; el alcalde de Belisario Domínguez, Aaron Loya Jáquez y por el Congreso del Estado, la presidenta Blanca Gámez Gutiérrez.
Aunque Corral Jurado digo que no busca el enfrentamiento, “ni la hemos buscado” terminó lanznado una amenaza al gobierno federal encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, “la batalla será no sólo recurriendo a los instrumentos que la Constitución permite, si no acudiendo a instancias internacionales para hacer valer los tratados que México ha suscrito, a fin de garantizar la seguridad los Derechos Humanos, las libertades políticas, la democracia y la soberanía de los estados subnacionales”.
Se dijo que el acto era poyado simultáneamente con junto a otras nueve entidades que conforman la Alianza Federalista para fijar posicionamientos, “ante la regresión autoritaria que vive el país”.
Pues, “no vamos a permitir ni el abuso ni el atropello, si la respuesta sigue siendo la indiferencia y los oídos sordos, estamos listos para dar la batalla política y legal”.